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Ya llega la primavera y con ella (se supone) el buen tiempo. Es el momento de empezar con la huerta (algunos ya habrán empezado y otros nunca la habrán dejado :) ) Hay un montón de libros e informaciones varias sobre huertos orgánicos, que están muy bien y resultan útiles en algunos casos. Pero como en todo en esta vida , en la huerta no se debe de generalizar pues dependiendo de la cultura, el clima e incluso las preferencias personales existen múltiples formas de sembrar,cultivar,abonar..etc y todas están bien.
A mí, personalmente, no me gusta complicarme la vida, pienso que cultivar es un placer y que se pùede hacer de forma sencilla sin grandes sofisticaciones. Y como, por el momento, nos consideramos meros aprendices en esto del huerto, lo que voy ir compartiendo con vosotros estos meses son los progresos de quién aún esta experimentando y aprendiendo de los que son los grandes maestros de la horticultura. Nuestros mayores.
Yo soy gallega y como buena gallega sé unas nociones básicas de cómo trabajar la tierra. En Galicia siempre hemos sido "pobres" (según dicen), pero para mí no hay mayor riqueza que lo que sacamos de esta tierra. Aquí se ha sobrevivido gracias a la agricultura y a la ganadería , somos labriegos y productores y quien más y quien menos tiene parientes próximos que cultivan sus tierras y han transmitido sus conocimientos a las generaciones posteriores.
Esto es un orgullo y un tesoro que está en nuestras manos seguir conservando. Además nos han facilitado con ello la posibilidad de ser independientes y autoabastecernos siendo capaces de entender y cuidar de nuestra tierra y de nosotros mismos.
Así que siguiendo los sabios consejos de nuestros maestros empezaremos hablando de lo más básico para comenzar a cultivar. Comprender el ciclo del retorno.
El suelo nutre a las plantas, las plantas a los animales y a nosotros, el estiércol de los animales y nuestros desechos orgánicos nutren el suelo, el suelo nutre a las plantas...etc
Hubo un tiempo en el que prácticamente no generábamos basura por que todo se aprovechaba para algún uso y lo que no se quemaba y las cenizas eran utilizadas para nutrir a la tierra de potasio. En eso consiste el ciclo natural.
Para comenzar a cultivar es necesario decidir en que lugar irá el huerto y preparar el suelo para la siembra. Es mejor ( si no se quiere usar ningún herbicida ni producto químico) elegir una parcela de tierra sin hierbas tenaces ( como ortigas y zarzas establecidas durante años) pues éstas vuelven a brotar cada vez más fuertes y nuestros esfuerzos consistirían casi únicamente en arrancar las malas hierbas del huerto.
Una vez decidido el sitio, se rozaría la superficie eliminando bien todo resto de raíces , escombros..etc luego, desherbaríamos arrancando bien las hierbas de raíz para que no vuelvan a brotar ( es mejor arrancarlas a mano con azada y rastrillo por que si sólo se cortan vuelven a brotar una y otra vez)
Una vez esté todo bien limpito hay que cavar el suelo, la finalidad de ésto es esponjarlo y airearlo. En esta fase y dependiendo del tipo de suelo y el clima de la zona, podemos mejorar la tierra añadiendo arena o grava ( sólo si el suelo es muy arcilloso y con tendencia a anegarse)
El siguiente paso sería abonar, y como lo que nos da la tierra ha de volver a ella, antes de cultivar debemos nutrirla con un buen estiércol animal (ya sea de vaca, caballo,cabras,conejos...etc) Si criamos animales ya estaremos surtidos , pero si no es así, seguramente algún ganadero esté dispuesto a suministrarlo sin ningún problema.
A parte del abono animal , se añade el compost con los desechos orgánicos acumulados a lo largo del año ( restos de comida, mondas,cenizas de leña..etc) y que lo ideal sería dejar madurar en un compostero o bidón mezclado con los desechos vegetales sobrantes de algunos trabajos del campo (podas...etc)
Hay quien mejora la tierra añadiendo fertilizantes, el purín de ortigas es 100% puro y eficaz ya que gracias a sus minerales nutre las plantas y ahuyenta plagas y parásitos, de esta manera evitaremos utilizar químicos que estropearían bastante la calidad de los comestibles que produzca el huerto.
Hay otra forma de enriquecer la huerta plantando de un año para otro plantas que favorezcan la nutrición del suelo, en Galicia se usa mucho el nabo que además sirve de alimento a los animales de cría y que también se puede consumir en la cocina, echándole imaginación con sabrosas recetas.
La mejor época para preparar el suelo es entre otoño y principios de primavera, así todo estará dispuesto para comenzar entre la primavera y el verano.
Ahora llegaría el momento de plantar. Normalmente primero se siembra en interior o invernadero en semilleros y se transplantan los brotes buenos y fuertes al exterior , nosotros decidiremos si preferimos bancales a surcos y como dispondremos el espacio según los cultivos que deseemos.
Hay plantas que se siembran directamente en exterior sin ningún problema.
La información que voy ir compartiendo con vosotros son los cuidados básicos de una pequeña huerta sencilla en la cual se plantarán, ajos, cebollas, fresas, puerros, calabacines, tomates, lechugas, zanahorias y pimientos según la temporada. Pero un huerto puede dar de sí todo lo que se quiera y ya es cuestión de preferencias ( y adaptaciones del espacio y del clima) lo que prefiera cultivar cada uno.
El calendario de siembra varía bastante de un lugar a otro, el que aquí pondremos es el típico del norte oriental de Galicia y como tal lo explicaremos.
Ajos y cebollas:
Lo primero que se planta es el ajo a finales de enero principios de febrero. El ajo se cultiva a partir de los dientes, para conservarlos y plantarlos de un año para otro simplemente hay que arrancar las cabezas una vez que las seis primeras hojas se vuelvan amarillentas, dejar secar al sol y atarlos en ristras, Para sembrar, hay que deshacer las cabezas y plantar los dientes derechos con la punta apenas cubierta por la tierra.
Lo siguiente que se puede añadir a la huerta es la cebolla, que se puede sembrar (aunque en más complicado que prospere) o adquirir la cebolla pequeñita para sembrar, la cebolla es bienal y un año florece y otro saca bulbo por lo que es habitual es comprar el bulbito que ya sabemos que prosperará.
Para una pequeña cosecha pero de cebollas grandes es mejor dejar espacio entre ellas y viceversa si se quieren muchas y pequeñas.
Tanto el ajo como la cebolla requieren poco riego, por eso se recomienda plantarlos en un mismo grupo (cerca unos surcos de los otros) así facilitaremos y agilizaremos los trabajos de mantenimiento del huerto.
Pues, por ahora que todavía no hemos terminado el mes de febrero, eso es todo. Iremos viendo como avanza y porspera esta huerta del año 2013. Para acabar cito a John Seymour que es un maestro en esto de la horticultura y la autosuficiencia.
"Autoabastecimiento no significa retroceder a un nivel de vida más bajo,
al contrario, es la pugna por conseguir un nivel de vida más alto,
alimentos frescos, buenos y orgánicamente elaborados,
una vida grata en un ambiente agradable,
la salud corporal y la paz mental,
que nacen de un trabajo duro y variado,
al aire libre"
Saúde e sorte coa horta¡¡¡¡¡
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